No sé que decirte madre
que no te haya dicho ya,
sin embargo, al mirarte,
siento esa necesidad.
Y apretándote en mis brazos
con ternura y con anhelo,
dejo salir las palabras
¿mamá, sabes que te quiero?
Y tú me miras despacio
y con tu frágil sonrisa
me trasladas tu mensaje,
como si fuera una brisa.
Y fundiéndonos las dos
en el mismo pensamiento,
siento lo que sientes tú.
Tú, sientes lo que yo siento.
Ani
lunes, 2 de febrero de 2009
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