Hola mamá, hoy se cumple la tercera efeméride del final de tu paso junto a nosotros.
Que de cosas han pasado y que rápido marca mi reloj las horas que me han separado de ti. Triste el ser humano que se empeña en medir el paso de unas vidas tan efímeras como imaginarias.
Si mamá imaginarias, procuramos creer que nosotros no terminaremos aquí, que seremos diferentes a todos los demás animales y seremos eternos, que poco sensato es el ser humano.
Yo me quedo con los 38 años, 8 meses y 3 días que viví junto a la persona más adorable y buena que he podido llegar a conocer en mi momento de vida que me toco vivir.
El haberte conocido y aún mas, haber sido tu hijo, es lo mejor que me ha podido pasar en la vida, y la necesidad de volver a verte, lo único que me hace dudar y me lleva a veces a creer en una existencia posterior.
Si mama, el ser humano es así de egoísta, muy convencido de sus ideas cuando los demás son el resultado de sus conclusiones, pero cuando nos toca de cerca, que diferente se ve todo.
La necesidad de creer que junto a padre estés en algún lugar viéndome y esperando que mi tiempo pase y me reúna contigo, pasa por mi mente.
Como estas dudas existenciales no se resolverán, me quedo con tu compañía en los años pasados, tus muestras de cariño y humildad, tus gestos de resignación ante algo con lo que claramente no estabas de acuerdo.
Y sobre todo contigo, me quedo contigo, porque no solo fuiste mi madre, sino que siempre serás mi luz.
Te quise, te quiero y siempre, siempre te querré.
Tu hijo.
Postdata: Los chicos y Ani te mandan un beso muy, muy fuerte. Ya no los conocerías, están grandísimos, y aún cuando tu nombre sale un velo de tristeza recorre sus caras.
Jose Manuel
jueves, 18 de febrero de 2010
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Ojala tus pensamientos sean ciertos y podamos ver a nuestros seres queridos después.
ResponderEliminarNunca nadie dio muestra de que así fuera, pero
también nos cuesta pensar que nunca mas los volveremos a ver.
Un abrazo primo, muy bonita tu carta
Su luz brillará siempre, su aureola nos acompaña y añoramos su presencia. Por eso nos es imposible pensar que no habrá otro reencuentro.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte
Aunque nunca digo nada
ResponderEliminarpero mi corazón siente,
siempre la tengo en mi mente
era mi querida hermana.
Me dejó un poco atontada,
era la mas chica de las tres
y cuando yo me enteré
también me encontraba mala.
Estaba recién operada
y ya no la pude ver,
hace tres años que se fue
y aun no comprendo nada.
Y no encuentro las palabras
para expresar lo que siento
estaba siempre esperando
que el verano ya llegara
para verla y estar con ella
y ese año no llegó.
Un abrazo
Querido primo, cada día estoy más maravillada de como sabes expresarte. Tu carta es magnifica y tu madre, desde el cielo, estará muy orgullosa de ti porque eres un reflejo de su bondad y su persona, y como ella, entrañable e inmejorable. Os quiero.
ResponderEliminarNuncate te va a faltar ,mi beso, mi rosa ,y mi lagrima...
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