Es verdad que la espera se hace dura,
pero tenemos una gran familia
que siempre está ahí echa una piña
y la energía fluye fuerte y pura.
Nos transmite esa fuerza positiva
que necesitamos para resistir
todas estas cosas que hemos de vivir,
que por desgracia las hay en la vida.
Como siempre después de las tormentas
el sol sale con mas fuerza brillando,
las aguas que antes eran violentas,
se vuelven suave y mansas vajando,
la calma llega otra vez aunque lenta
y todo al fin se va apaciguando.
Familia incondicional,
ResponderEliminarfuerza positiva,
las aguas se vuelven
mansas y cristalinas
y el sol que tú has citado
de nuevo ilumina...