martes, 24 de agosto de 2010
Fiesta en los Pepones
El veintiuno de agosto
fue la fiesta en los Pepones,
con una misa comenzamos
llena de amor y peticiones.
Pedimos por los ausentes
que allí no podían estar,
por los que están enfermos
y se tenían que cuidar.
Por aquellos que se fueron
que tenían que viajar
y por los que ya marcharon
para nunca regresar.
Un conjunto de emociones
recorría nuestras mentes,
con súplicas y oraciones
de todos los allí presentes.
Y ya para finalizar
la salve a la Virgen María,
el vello se iba a saltar
de la tensión que allí había.
Luego vino lo demás
el encuentro con las gentes,
la música comenzó a tocar,
todo el mundo sonriente.
Empezó el presentador
que de un libro nos hablaba
hecho con mucha ilusión,
de recuerdos se trataba.
En él se hallan grabadas
parte de nuestras historias
que siempre estarán guardadas
muy dentro en la memoria.
Después vino el pregón,
no se como describirlo,
a todos nos maravilló
y quedamos así cautivos.
Que palabras mas bonitas
hablando de sus vivencias,
con sencillez exquisita
las trajo a nuestra presencia.
Y entre música y versos
siguió el ritmo del día
y se entregaron los premios
de pintura y poesía.
La orquesta siguió tocando
para el que quiso bailar,
algunos así lo hicieron
allá hasta la madrugá.
Fina
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Tu poesía fue muy bonita
ResponderEliminary me hizo emocionar,
desde aquí, en mi casita
pude la fiesta gozar.
Me parece que estoy viendo
cantar la salve a la Virgen,
la emoción la estoy sintiendo
recordando hoy su esfinge.
Es un placer y un honor,
ver a todos los Pepones
unidos bajo su amor
pidiendo sus bendiciones.
La música y la poesía,
gozaron hoy los presentes,
un recuerdo en este día
para los que están ausentes.
Un abrazo.