Agua que del cielo baja
a veces tan deseada,
como se siente en el alma
cada gota que derramas.
Un sin fin de pensamientos
recorren la mente mía,
cuanto golpe y sufrimientos,
que difícil que es la vida.
Pero cálmate un momento
deja ya de desvariar,
tengo el amor de los mios
y vale mas que lo demás.
Es verdad que hay tropezones
y te caes por los suelos,
pero hay que levantarse
para caminar de nuevo.
Me relajo y me duermo,
que se hunda el mundo entero,
si tengo alguien a mi lado
ya no tengo ningún miedo.
jueves, 19 de agosto de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario