nada se puede igualar,
es parte de tu existencia,
son tus pasos al andar.
Cuando lloras te consuela,
cuando sufres, mucho más,
son sus brazos el refugio
donde tú encuentras la paz.
Si tropiezas te levanta
dándote fuerza y apoyo
para volver a empezar,
con su amor tan especial.
Cómo la echamos de menos
cuando nos falta, ¿ verdad?,
cuando de chica no estaba
me ponía a llorar.
Hoy no la tengo conmigo,
ya hace tiempo que no está.
cómo la echo de menos,
¡te extraño mucho mamá!
Loli Beltrán