Ayer vimos tu sonrisa
acariciar nuestra alma,
fuimos junto a ti, de prisa,
a festejar la jornada.
Contemplamos embobados
a la pequeña Ariadna,
¡cómo te llenó de besos
acariciando tu cara!
La escena de su ternura
conmovió a los que allí estaban,
con su inocencia tan pura
tu biznieta te abrazaba.
Momentos tan entrañables
quiero que sigas gozando
que tu vida sea agradable
y que cumplas muchos años.
Con todo mi cariño,
Loli.
Después de aguantar la espera
ResponderEliminarque siempre es desagradable,
la han dejado como un reloj
su tensión es inmejorable.
Años le quedan por ver
como crecen sus bisnietos,
y que la puedan querer
eso si es un buen reto.