lunes, 19 de abril de 2010
Barquito de papel
Como barquito de papel
yo me encuentro a la deriva
sin saberme a que coger,
todo se hace cuesta arriba.
El viento me bambolea
las corrientes me lastiman,
me dejan en una verea
o me dan contra una esquina.
Hay pobre barquito mío
que poco valor y estima,
solo juguete de un crío
que no te aprecia ni mira.
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Nada tiene un valor fijo,
ResponderEliminarsolo el que cada cual quiera darle.
Tal vez ese barco pequeño
para otros ojos sea grande.
Y lo piense en sus desvelos,
lo vea cruzar los mares.
Y sueñe con que algún día
de nuevo vuelva su nave.
Un barquito de papel
ResponderEliminartiene un final ya sabido,
se lo lleva la corriente
y al final es destruido.
Naveguemos en los mares
y sigamos la corriente,
pero nunca permitamos
hundirnos sin hacer frente.
El final de todo barco
ResponderEliminarsiempre es la destrucción,
porque nada es eterno,
lo cambian por otro mejor.
Pero mientras nos movamos
tenemos que luchar fuerte
no dejar acobardarnos
es algo del inconsciente.
El barquito de papel
ResponderEliminartambien tiene su destino,
mirémoslo como un juego
y será más divertido.
Puede ir a la deriba
o navegar con buen tino
quizás le cueste llegar,
lo importante es el camino.