Ayer sentí la nostalgia
adornar mis pensamientos,
me refugié en sus fauces,
lancé mis quejas al viento.
El viento me devolvió
mi quejido en un lamento,
el eco de su sonido
inundó prados y tiempo
El viento de la esperanza,
del manantial siempre abierto
a la luz de la alborada
en medio de aquel desierto.
Eran aires que llevaban
la chispa de un fuego intenso
asolapada en la tierra,
pisoteada en su lecho.
Hoy me ahogo en la nostalgia,
algo me oprime por dentro,
su calor, aquel calor
de un rojo color intenso,
se esfuma bajo la niebla
y el agua apaga su fuego.
Cuando los aire no cambian,
ni el color , ni el pensamiento,
algo se muere en el alma,
poco a poco va muriendo.
Loli
domingo, 11 de septiembre de 2011
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Muy linda,hermana, como todo lo que escribes
ResponderEliminarhay alguien que escriba mejor que tu?. Que lindo! Mari
ResponderEliminarUUfff..
ResponderEliminarQué bueno Loli.
Transmites una fuerte emoción en tu poema.
Me ha encantado.
Felicidades..
* Masmoc Utopía