Hoy me gustaría detener mi pluma
en un bello verso dedicado a ti,
donde no halla niebla, donde no halla bruma,
donde sea tu cielo de un azul añil.
Donde tu sonrisa juegue con la luna
dejando en el cielo un sabor a ti,
llenando el espacio tu bella figura,
tu reflejo amado, tu bello perfil.
Quiero recordarte en tu vieja cuna
cuando acariciaba tu cálida piel,
donde te mecía, siempre con ternura,
velando tus sueños con sumo placer.
Entre cuentos y nanas tú te adormecías
y el sueño cerraba tus ojos de miel,
y me complacía ver como dormías,
verte cada día crecer y crecer.
Ahora por las noches también me desvelo
aunque ya tú seas toda una mujer.
Quiero que tu vida sea un bello vuelo
hacia la grandeza de todo tu ser.
Que sigas creciendo en amor y sueños
y de los errores siempre aprender
a esquivar los baches y seguir subiendo
y allá en las alturas, sembrar y coger.
Cuando ya estés llena de sabiduría,
de amor, de alegría, reparte también,
no dejes jamás nadie en la agonía
de pasar la vida sin saber crecer.
¡Feliz cumple, cariño! Mamá.
Te lo pongo hoy porque ayer no pude.
Precioso poema, para tu hija divina.
ResponderEliminarLa llenas de flores,hasta la cima.
Como su madre no hay quien iguale tu felicitación.
FELICIDADES PRIMA.