¡Mi pequeña y dulce Anna!
llena de brisa temprana,
que acaricia mis sentidos
y me deja embrujada.
Tú eres para mí la aurora
que ha entrado por mi ventana,
rayo de luz que deslumbra
a mi vida ya cansada.
Yo siento tu plenitud,
me da brillo tu mirada,
eres sol y eres remanzo
de alegria desbordada.
Eres arruyo y carícia,
un manantial de agua clara
que refresca hoy mi vida
como una bella cascada.
Una ternura infinita
se ha colado hoy en mi alma,
eres tú, mi pequeñita,
¡sueño dorado del alba!
Aunque la noche esté cerca
me haces ver la madrugada,
sueño contigo despierta
y durmiendo veo tu cara.
Siempre seràs tu mi reina,
reinarás en mi morada,
¡mi pequeña y dulce nieta!
la primera de su yaya.
Loli Beltrán
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Seguir tus pasos quiero
ResponderEliminarSeguir tus letras rimadas
Poco a poco detrás me quedo
Si no se encarrilarlas
Muchos besos para los padres y los yayos
Ya estábamos esperando
ResponderEliminaresta hermosa poesía
que llebabas dias rumiando
y ponerla no quería,
Todo te parece poco
pa expresar lo que sentías
por eso has tardado tanto
pero la pena valía.
Muy linda