Hoy vivo en un mundo
de injusticia creciente,
donde el llorar de un niño
les es indiferente.
Donde existen los sueños
sólo para pudientes,
los pobres sólo sueñan
poder comer caliente.
Donde la diferencia
de clases es patente,
unos viven en palacios,
otros debajo un puente.
Este mundo en que vivo
no es un mundo decente,
dirigen nuestras vidas
los corruptos de siempre.
Nos tapan los oídos
con música estridente,
nos tienen entretenidos,
manipulan nuestra mente.
No podemos quedarnos
impasibles y ausentes,
está en juego la vida
de millares de gentes.
Luchemos todos juntos
por la liberación,
unamos nuestra fuerzas
por un mundo mejor
donde exista la magia
de la renovación .
lunes, 18 de junio de 2012
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Es verdad que en nuestro mundo
ResponderEliminarhay muchas clases sociales,
unos nadan en oro puro
y otros solo encuentran aire.
Si todo se repartiera
no existiría ya el hambre
y a donde quiera que fueras
todos serían amables.